¡Sobreviví a la maestría! Tras dos años de ñoñez extrema y aún bastante atarantada, pero al menos ya con las horas de sueño correctas, retomo mi blog con un "¿en qué me quedé?"... pero no tengo la menor idea; no sé qué estaba haciendo antes de la maestría, ni entiendo cómo me acabé convirtiendo en ésta que ahora escribe. Y eso es lo único claro: que escribo; sigo escribiendo.
Así, pues, qué remedio, estamos de vuelta, ya no más como quienes éramos hace un par de años, aunque aún con el nombre intacto: bienvenidos todos de vuelta.
Bienvenida, un gusto volver a leerte seguido. Has cerrado un ciclo, que requirió de tu tiempo, esfuerzo y fortaleza. Saludos
ResponderEliminar